domingo, 29 de noviembre de 2020

TOMO II

M. Jiménez Catalán y J. Sinués y Urbiola

Historia de la Real y Pontificia Universidad de Zaragoza

OBRA PREMIADA

por el

Patronato Villahermosa - Guaqui

en el

CONCURSO 1920- 21

Zaragoza

Tip. La Académica - Cinegio, 3

1924

PATRONATO VILLAHERMOSA- GUAQUI

Historia de la Real y Pontificia Universidad de Zaragoza

CONCURSO DE 1920- 21

M. JIMÉNEZ CATALÁN y J. SINUÉS Y URBIOLA

HISTORIA DE LA REAL Y PONTIFICIA

UNIVERSIDAD DE ZARAGOZA

TOMO II

ZARAGOZA

Tipografía "La Académica" - Cinegio, 3

1923

Si el amable lector ha seguido con benévola atención el curso de las materias tratadas en el primer tomo de nuestra Historia, pronto se habrá dado cuenta de que en él tan sólo hemos estudiado los fundamentos y el régimen y gobierno de la Universidad cesaraugustana.
Diríase haber analizado todo el aparato externo del templo magnífico en donde los
doctores aragoneses se cobijaron y donde la voz honrada del saber sonó con acentos solemnes y armoniosos.
Ahora, en este volumen segundo, procuramos poner de manifiesto la labor científica realizada por los universitarios de las distintas facultades en sus cátedras, ajustándonos, como siempre, a las notas documentales y dejando hablar a éstas, cual corresponde a toda obra basada en la más depurada investigación histórica.
Organización de Facultades, planes de estudios, doctrinas filosóficas sustentadas, lo que constituye, en fin, el contenido espiritual de nuestra Escuela máxima, es lo que en el transcurso de esta segunda parte desarrollamos.
Y a un tiempo mismo hemos creído de singular utilidad decir algo de los elementos auxiliares que tuvo la Universidad para mejor realizar su labor docente: colegios, academias, repasos, fueron los organismos que coadyuvaron en la empresa cultural del Alma máter.
Entusiasmo creciente y probidad literaria son las dos características que resplandecen principalmente en nuestro trabajo. Entusiasmo, porque sin él no hay empresa posible y, además, porque cuanto más ahondamos en las excelencias y bondades de nuestra Universidad, tanto más se enardece en nosotros el cariño hacia ella.
No por esto dejamos de comprender y consignar sus defectos: dejaría de ser obra humana si no los tuviera.
Pero sus faltas son las de su época.
¿Por ventura hay alguna institución que pueda desasirse por completo del ambiente que le rodea?

En historia no hay más remedio que abstraerse de los tiempos actuales, y para juzgar debidamente un hecho de nuestros antepasados, tenemos que situarnos mentalmente en sus días coetáneos; pensar y sentir como ellos: entonces nuestro juicio será cierto.
Por último, nos resta rendir un tributo de gratitud a la opinión pública, manifestada en la Prensa diaria y periódica, por la bondad con que ha acogido la publicación del primer tomo de esta obra. Ella nos alienta para seguir adelante en la difícil tarea de dar fin a la Historia documental de la Universidad de Zaragoza.

Portfolio

    Ramón Guimerá Lorente Beceite blog, Beseit Beseit en chapurriau yo parlo lo chapurriau  y lo escric Chapurriau al Wordpress Lo Decamerón...