CAPÍTULO XI
SELLO
Y ARMAS DE LA UNIVERSIDAD
En los primeros Estatutos se dispone
que la Universidad tenga un sello, y por armas esculpidas, en el
medio, la imagen del bienaventurado San Pedro, con su tiara y llaves,
y a una parte una S que quiera decir Sanctus, y una P a la otra que
quiera decir Petrus, y a la otra parte derecha, las armas del Reino de Aragón, la cruz y cuatro cabezas; y a la
parte izquierda, las armas de
la ciudad de Zaragoza, que es
un león con su corona real.
De este sello debía
usar el Rector en las cartas misivas en nombre de la Universidad y en
todos los privilegios, patentes, testimonios, despachos y escrituras
que se hicieren y despacharen a nombre del Rector, como tal y a
nombre de los diversos Claustros que se celebrasen; en las cartillas
de los Grados debía ponerse el sello, que era pendiente, en cera,
encerrado en una cajita de hojadelata, y aunque los diera el
Arzobispo, como Cancelario, no podía utilizar el suyo, sino el de la
Universidad.
Este sello y estas armas no podía mudarlas el
Rector, ni los Consiliarios, ni el Claustro pleno, debiendo estar en
poder del primero.
Había dos sellos, uno grande y otro pequeño;
el Rector, por ponerlos, tenía de derechos dos reales por el primero
y uno por el segundo.
Por los Estatutos de 1645 se modifican las
armas de la Universidad, pues quedan en el sello en la forma
siguiente: en el centro, San Pedro; a la derecha, las armas de
Aragón; a la izquierda, las de Zaragoza; se suprimen la S y la P.
En
esta forma le vemos figurar incluso en los Estatutos de 1713.
En
1836 se varió completamente, poniéndose una Minerva con una
antorcha y un libro en la mano derecha, un ramo de oliva en la
izquierda, y a sus pies, un mochuelo a la derecha, un libro y
un tintero a la izquierda, y por debajo de
todo, la palabra
Madere. A los diez o doce años se compuso un escudo que en
1751 se grabó en París para sello seco, el cual tiene los
cuatro cuarteles de Aragón, sobre el todo el escudo cortado del
protector Cerbuna, con la tiara y llaves arriba y el ciervo
abajo, y cortinado con el león de Zaragoza.
La Universidad
usa actualmente dos sellos: uno en tinta y otro en seco, para los
títulos de bachiller que expide; ambos idénticos al de los
Estatutos de 1645, variando las leyendas; el sello en tinta lleva la
siguiente: Vniversidad de
Zaragoza, y el seco, Sigilvm • Stvdii
• Generalis • Ciuitatis • Caesaravgvstam.
Dispuesto por
los primeros Estatutos y por cuantos se establecieron después que
esta Universidad tuviera su Bedel con maza, a estilo de las demás
que funcionaban en España, el Dr. Torrellas, prescindiendo de la
antigua que usó el
viejo Estudio de Artes, y de la que ya hemos
dado cuenta, mandó construir, en 1588, una que se conserva en la
actualidad: es de plata sobredorada; en el remate superior, de estilo
ojival, influenciado ya por el renacimiento, campean las armas con
arreglo al Estatuto, pero sin la S y P, y en la contera, esta
leyenda: Esta maça hizo
hacer el doctor Pedro Torrellas y Perillos, siendo Rector en
el año 1588.
Frailla, en su Lucidario, dice: "El año 1588,
que fue el Dr. Pedro Torrellas, Canónigo del Aseo, Rector de la
Universidad, él mismo, a sus costas, hizo una maza muy buena de
plata sobredorada, con las armas de la Universidad, que
son un San
Pedro con su tiara de pontifical y las tres llaves, assentado en una
silla, y a la mano drecha, las armas del Obispo de Aragón, que son
las quatro cabezas, y a la izquierda, las de Zaragoza, que son un
león con una corona real, y no pusieron las armas del Sr. Obispo D.
Pedro Cerbuna, que son un ciervo y un cordero, porque en los
Estatutos que se hicieron en 1583, a 20 de mayo, que fue la
fundación, los señores Jurados mandavan se pusiessen, y él mismo
señor Obispo no quiso, y puso en los Estatutos, de su mano,
escriptas estas palabras: "Esto no ha querido poner el Prior en
el sello porque en el cielo quede el nombre, y por esto quizá otros
particulares no se retirasen de hazer bien a la Universidad; y a este propósito, a mi, el Dr. Diego Frailla, escribió tratando de poner
sus armas en las escuelas, que él de muy buena gana daría lugar a
que quien quisiesse meter sus armas y escudos en ellas las puesiesse,
y quitaria las suyas solamente hubiese quien hiciese bien en
ella".
En efecto: en lo único que hoy se conserva de la
vieja Universidad, la capilla, convertida en depósito de libros de
la Biblioteca Universitaria, están las armas de Cerbuna sobre la
puerta de la entrada y en los arranques de la bóveda,
a ambos
lados de lo que debió ser el presbiterio.
Con la modestia que le
era peculiar al fundador de nuestra Universidad, hizo quitar del
sello sus armas, puestas por los Jurados; así consta en el primer
Estatuto: " ... en el remate del sello, un ciervo pequeño
con una P a la parte drecha y una C a la izquierda, por memoria del
Dr. Pedro Cerbuna" .
En el año 1875, y siendo Rector
D. Jerónimo Borao, se construyó otra maza idéntica a la de
Torrellas, con la inscripción: Bajo el Rectorado del Excmo. Sr. D.
Jerónimo Borao hizo esta maza el platero M. Mainar, en Zaragoza,
1875.
Indudablemente y desde entonces son dos los maceros
de la Universidad, por cuanto ya con arreglo a los nuevos planes de
enseñanza y a las reorganizaciones que por ellos tuvieron las
Universidades españolas, desaparecieron los antiguos bedeles con la
autoridad que tenían en las antiguas.
Cuando la guerra con los
franceses y efecto de los sitios se perdieron gran parte de las
alhajas de la Universidad y efectos de la misma, pues vemos que en
Claustro de 3 de marzo de 1814 se pone de manifiesto, nuevamente, que
los sellos no parecían y que a los graduandos no se le daban
cartillas por falta de ellos y su impresión, y sí sólo una mera
certificación. Se acuerda que no encontrándose los sellos, se hagan
nuevos, así como impresión de cartillas.
En 1816 vemos que la
Universidad extravió el sello pequeño, pues en Claustro de 9 de
mayo de ese mismo año dase cuenta de ello y de la necesidad de hacer
uno nuevo, por cuanto era el que se utilizaba para las cartillas de
los
bachilleres; se acuerda hacerlo y que éstas se den en
pergamino.